DE RECOGIDA

Lucia limpio todo muy bien, el suelo también

Manuel, Pepito chico, para mi, se encargo del carrito, era un Fitipaldi

Angel y Pepe, pendiente de las gambas

El maestro cocedor , las coció muy bien, pero empleo hasta un móvil para hacerlo ya me explicara como se cuecen las gambas con un móvil estos adelantos tecnológico, sorprenden.

Rocio y Manuel en plena faena el caballero quiere comer solo, cierto que lo hace muy bien

Ayer nos toco, la recogida -refinitiva- de la casa del Rocio. Mi amigo Angel tiene un cuartillo en la azotea, donde cabe un elefante. Cuantas cosas metimos en ese cuarto,¡ Dios mio !. Pepe, nos coció unas gambas y cigalitas que le salieron riquisimas, pero empleo algún truco, por que yo lo vi con un móvil en la mano, algo raro había allí, ya me enterare y os lo cuento. ¿ Estará ya en el mercado un móvil para cocer gambas ?. No me extraña nada, esta ciencia adelantan que es una barbaridad y los de Telefónica por ganar dinero, inventaran lo que sea. Lucia se propuso limpiar a fondo la casa y ciertamente que lo hizo, además como es pequeñita y muy joven , llega a sitios que los mayores ya tenemos prohibido, entienda se las partes bajas de las mesa y las sillas. Manuel, mi Pepito chico, trinco el carrito de Lucia por banda y le pego unas carreras al muñeco que esta dentro del carro, que el pobre salio blanquito. Y el muñeco había pasado un rocio, - rebolcao- , osea que estaba un poco marron. La comida fue muy agradable, buena y la compañía excelente y como fin del viaje, nos marchamos hacia la Virgen y presenciamos el comienzo de una boda. La novia llego en una calesa a la inglesa, con dos magnificas caballos y creo que gobernada por mi amigo Francisquito.