Baltasar, siempre de buen humor
La tienda de Baltasar-esquina Roque Barcia con Miguel Redondo
En esa Huelva, semi antigua que yo viví en mi niñez y hasta mis años mozos. Existía una tienda en Huelva, donde todos los críos y no tanto, hemos comprado, los petardos y cohetes, para la navidad, las zambombas y panderetas y yo particularmente un belén de figuras de barro, artesanal, que ya apareció en un pos anterior.
En esta tienda, se vendían, los artículos de bromas que ahora venden los chinos, pero esos eran mas originales. Las bombas de peste, que asco, como olian de mal.
Cuando ahora paso por el lugar donde estaba dicha tienda, siento nostalgia de esos tiempos vividos, de nuestra inocencia y del poquito dinero que manejábamos los críos, para poder comprar algo. Ahora los niños, tienen el suficiente, para adquirir, unos petardos que son hasta peligroso.
La ultima vez que entre, Baltasar era ya muy mayor, lo ayudaba uno de sus hijos, pero el hombre con su babi, de color gris claro, arrastrando unas babuchas, seguía detrás de su mostrador de madera.
Mis padres me contaron una anécdota de su juventud : Vino a Huelva un Zeppelin y por unos reales de entonces, te permitían subir, hasta las alturas. Baltasar subió y bajo, con los pantalones algo manchados. Creo que por los carnavales de antaño, le sacaron una copla.
4 comentarios:
Bueno, en realidad lo que te introduje en el texto del comentario fue la letra de una copla de Carnaval que sobrevivió al menos a mis años mozos. También estrené en ese comentario un recurso literario curioso, abrir y cerrar paréntesis con una ruptura interior, y además empezando la copla fuera del paréntesis y terminándola a la mitad del mismo. Esto, yo al menos, no lo he visto nunca. Quiere decirse que es un invento. Me ha gustado y lo volveré a utilizar. Aunque puede que sea difícil de entender, pero en fin. Abrazos.
Ciertamente curioso, ese recurso literario.
Me perdonaras que no abunde en el tema.
Lo mió, son los micrófonos.
Si no fuera por los magníficos correctores ortográficos, de estos aparatos, ya verías por donde andan mis " V " y mis " B ".
Saludos.
Dices que la tienda de Baltasar estaba en la esquina de las calles Roque Barcia y Miguel Redondo. Debe ser un error de transcripción, pues era la esquina de Miguel Redondo con la c/ de las Señas (o de La Aceña) ó 18 de julio, actual Pérez Carasa. El retrato de Baltasar genial.
JORMANZ.
Amigo mio lleva usted toda la razon, confundi los nombres propios de las calles.
Bienvenido a este blog, que últimamente tengo casi abandonado.
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