Seguimos con las mini vacaciones. desde Lagos, con el coche, nos dirigimos a las playas del Alentejo, Cordonara, creo que se llama, la que visitamos. Esta pasando Vila del Obispo. Es una playa inmensa con mar bravío, agua helada y difícil el baño, pero el encanto esta por doquier. Normalmente el publico suele guardar una distancia prudente, pero a mi me fastidiaron el dia, llego un grupito de surferos catalanes, que coño, hacen tan lejos de sus costas, y se me colocaron a escasos
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26 agosto, 2009
LAGOS II
tamborada de pescado, mariscos y arros
que lote nos dimos
el color rojiso, es por la sombrilla que nos covijaba
el mar en algunas zonas del Alentejo, pega muy fuerte
el agua esta clarita, pero tremendamente fria. A mi me gusta
la playa era solitaria, pero los capullines estos, se colocaron a escasos 10 metros
es que no habia playa, sabes.
mira como es de inmenso el mar y sus costas
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6 comentarios:
jajaja, catalanes tenian que ser!!! Que escapadita tan mona os habeis pegado....No conozco yo muy bien esa zona y me gustaria conocerla pero como siempre tiro para el norte, jajaja. Este finde me piro para Andorra, a perderme entre sus montañas y sus tiendas, jajaa, donde va a ir una pecadora del consumismo???
Besitos....ah!!! un detallazo la foto de tu amiga, ainnnnnnnnsss,algun dia me casare yo tambien!!!.
pero q sitios mas estupendos nos enseñas!! joo lo q daria por estar en una calita de esas
bsss
Ja, ja, ja, es verdad, siempre se ponen al lado a dar por culo. Por mucha playa que haya, ya puede tener quinientos kilómetros libres, como vengan tres tontolculos con sus motos náuticas, sus radiocasetes o lo que sea, se te plantifican al lao.
Perdone usté maestro, pero me parece que el Alentejo (que viene a significar Allende el Tajo, Tejo en portugués) no tiene ni un metro de playa. Creo que está vuesa mercé refiriéndose al Algarbe, a nuestro vecinos de aquí al lao. Un abrazo don Pedro.
Posdata: a ver si le mando un retrato que me hice al lao de esa mano metiéndome el deo en la narí. Je, je, je.
Espera, espera, que sí que tienes razón, más pabajo de Lisboa es Alentejo también, que no es solo la profundidad de Beja o Évora, también esa zona de playas y cantiles tan hermosa. Es Alentejo, perdona por la metedura de pata, pero es que a mi se me van las manos en el teclao con demasiada rapidez. Un abrazo.
Hombre, Pedro, perdona que sea tan pesao, pero es que me tienes la picha hecha un lio. A ver dónde coño has estao. Si tiras de Faro (Algarbe) para Vila do Bispo (Algarbe tambíén) y luego para el norte, te encuentras con las playas de Castelejo y Bordeira, primero. Luego, más al norte aún y después de la Ponta da Atalaia, están las praias de Monte Clérigo y Carriagem, y luego la de Odeceixe. Todo esto es Algarbe.
Más al norte aún y a unos cien kilómetros de Vila do Bispo, está Zambujeira do Mar, y ahí es donde empieza la costa del Alentejo, que llega hasta el cabo Espichel y Sesimbres, ya en el litoral lisboeta. Por ahí no me suena la playa que me dices, así que coge un mapa y me dices dónde coño has estao, si en el Algarbe o en el Alentejo que antes despojé impunemente de playas, y eso que tiene lo menos ciento veinte kilómetros de arenales infinitos como esos que tan extraordinariamente bien has retratado. De lo de los catalinos dando por culino, todavía me estoy riendo. Y escucha, tronco, como se entere la señorita de Geografía nos pone de rodillas y mirando a la pared. Si no, al tiempo.
Amigo Bernardo, creo que con nuestra información, vamos a crear un conflicto de fronteras, entre las regiones. Me atengo a los mapas de Google. Las playas visitadas fueron Castelo y Bordeira, segun Google Map, se encuentran al final de la carretera EM1265, una vez atravesado Vila del Obispo. Estos denominan a la zona, como : Parque Natural do Sudoeste Alentejano e Costa Vicentinantina. Hay es na el nombrecito, para una extensión de terreno, con algunos pinos enanos, un poquillo de matorral o monte bajo. Animales los únicos que vi., fue un cafre, que con un paracaídas de esos tipo parapentes, intentaba volar desde la misma cornisa del mirador y que al menos en dos ocasiones, estuvo a punto de deslomarse.
La señorita de geografía que tuve en el instituto, era una potente mujer cuarentona que ya me gustaría que me castigara. Entiendes.
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